sábado, 8 de septiembre de 2012


HIMNO NACIONAL DE COLOMBIA

El himno nacional de colombia fue compuesto en 1887 con versos de Rafael Núñez y música del compositor italiano, Oreste Sindici, para conmemorar el 11 de noviembre la Independencia de Cartagena. La Ley 33 del 28 de octubre de 1920, sancionada por el presidente Marco Fidel Suárez, le dio carácter oficial. Consta de coro y 11 estrofas:

CORO

¡OH GLORIA INMARCESIBLE!
¡OH JUBILO INMORTAL!
¡EN SURCO DE DOLORES
EL BIEN GERMINA YA.


PRIMERA ESTROFA

CESÓ LA HORRIBLE NOCHE 
LA LIBERTAD SUBLIME 
DERRAMA LAS AURORAS 
DE SU INVENCIBLE LUZ.
LA HUMANIDAD ENTERA
QUE ENTRE CADENAS GIME,
COMPRENDE LAS PALABRAS
DEL QUE MURIO EN LA CRUZ.

SEGUNDA ESTROFA

"INDEPENDENCIA" GRITA
EL MUNDO AMERICANO:
SE BAÑA EN SANGRE DE HEROES
LA TIERRA DE COLON.
PERO ESTE GRAN PRINCIPIO 
EL REY NO ES SOBERANO 
RESUENA, Y LOS QUE SUFREN
BENDICEN SU PASIÓN.

TERCERA ESTROFA

DEL ORINOCO EL CAUCE
SE COLMA DE DESPOJOS,
DE SANGRE Y LLANTO UN RIO 
SE MIRA ALLI CORRER.
EN BARBULA NO SABEN 
LAS ALMAS NI LOS OJOS 
SI ADMIRACION O ESPANTO 
SENTIR O PADECER.

CUARTA ESTROFA

A ORILLAS DEL CARIBE
HAMBRIENTO UN PUEBLO LUCHA
HORRORES PREFIRIENDO 
A PERFIDA SALUD.
¡OH SI DE CARTAGENA 
LA ABNEGACION ES MUCHA,
Y ESCOMBROS DE LA MUERTE 
DESPRECIAN SU VIRTUD.

QUINTA ESTROFA

DE BOYACA EN LOS CAMPOS 
EL GENIO DE LA GLORIA
CON CADA ESPIGA UN HEROE
INVICTO CORONO.
SOLDADOS SIN CORAZA
GANARON LA VICTORIA;
SU VARONIL ALIENTO 
DE ESCUDO LES SIRVIÓ.

SEXTA ESTROFA

BOLIVAR CRUZA EL ANDE
QUE RIEGA DOS OCEANOS
ESPADAS CUAL CENTELLAS
FULGURAN EN JUNIN.
CENTAUROS INDOMABLES 
DESCIENDEN A LOS LLANOS 
Y EMPIEZA A PRESENTIRSE 
DE LA EPOPEYA EL FIN.

SEPTIMA ESTROFA

LA TROMPA VICTORIOSA
QUE EN AYACUCHO TRUENA
EN CADA TRIUNFO CRECE
SU FORMIDABLE SON.
EN SU EXPANSIVO EMPUJE
LA LIBERTAD SE ESTRENA
DEL CIELO AMERICANO
FORMANDO UN PABELLON.

OCTAVA ESTROFA

LA VIRGEN SUS CABELLOS 
ARRANCA EN AGONÍA
Y DE SU AMOR VIUDA 
LOS CUELGA DEL CIPRÉS.
LAMENTA SU ESPERANZA
QUE CUBRE LOZA FRÍA;
PERO GLORIOSO ORGULLO
CIRCUNDA SU ALBA TEZ.

NOVENA ESTROFA

LA PATRIA ASÍ SE FORMA 
TERMOPILAS BROTANDO;
CONSTELACIÓN DE CICLOPES
SU NOCHE ILUMINO;
LA FLOR ESTREMECIDA
MORTAL EL VIENTO HALLANDO
DEBAJO LOS LAURELES
SEGURIDAD BUSCO.

DÉCIMA ESTROFA

MAS NO ES COMPLETA GLORIA
VENCER EN LA BATALLA,
QUE EL BRAZO QUE COMBATE 
LO ANIMA LA VERDAD.
LA INDEPENDENCIA SOLA
EL GRAN CLAMOR NO ACALLA:
SI EL SOL ALUMBRA A TODOS
JUSTICIA ES LIBERTAD.

UNDÉCIMA ESTROFA

DEL HOMBRE LOS DERECHOS 
NARIÑO PREDICANDO,
EL ALMA DE LA LUCHA
PROFETICO ENSEÑO
RICAURTE EN SAN MATEO
EN ATOMOS VOLANDO
"DEBER ANTES QUE VIDA",
CON LLAMAS ESCRIBIÓ.


4. Temas románticos

Egocentrismo: El alma del hombre es su enemigo interior, identificable con una obsesión incurable por lo imposible, que priva del goce de la vida alindividuo y hace que ésta le sea adversa. El alma romántica no es dada desde fuera al individuo, sino que éste la crea cuando tiene conciencia de sus sentimientos. Convierte al individuo en singular y universal, de modo que el Universo sólo es posible concebirlo partiendo del conocimiento de sí mismo, pues el hombre es la imagen del Macrocosmos. Este egocentrismo en gran parte remite a Fichte: el Yo es la única realidad existente, pues "no hay más objetos que aquellos de los cuales tienes conciencia. Tú mismo eres tu propio objeto". Por tanto sólo el Yo es real, es el absoluto, y la poesía permite hacer sensible y comunicativa esta experiencia en tanto que es representación del alma y representación del mundo interior en su totalidad. El poeta es alma y universo. Este egocentrismo romántico tiene sus raíces en la filosofía kantiana y en el idealismo trascendental. Kant llevó el centro de gravedad de la filosofía hacia el interior del propio hombre y valoró el sentimiento para el acto del conocer. Y Schelling, con su filosofía de la naturaleza dio salida a la circularidad destructora de Fichte, pues el mundo entero se le acababa convirtiendo en un espejo que eternamente le presentaba al yo su propia soledad.
Schelling liberaba al hombre de encontrarse a sí mismo y sólo a sí mismo en todas partes. Admite la existencia de un mundo exterior opuesto al mundo interior (Yo). La intuición realiza la síntesis entre el Uno ("yo") y el Todo (la naturaleza). El Yo, el Uno se acerca a ese mundo externo para dialogar con él, coexistir con él y reconciliarse con él. El sujeto cree en una visión de algo que está más allá de la cosa, que puede percibir gracias a una intuición esencial en un ámbito de libertad.
La Libertad: El reino de la libertad absoluta es el ideal romántico, el principio de toda ética romántica: libertad formal en el arte, entendida como necesidad del individuo para explorarse y explorar el mundo exterior, y para lograr la comunicación del Uno con el Todo, en una marcha progresiva hacia el infinito. El romántico se concibe como un ser libre, el cual se manifiesta como un querer ser y un buscador de la verdad. No puede aceptar leyes a ninguna autoridad. Muchos románticos heredaron la crisis de la conciencia europea que la Ilustración provocó al cuestionar, en nombre de la razón, los dogmas religiosos.
El amor y la muerte: El romántico asocia amor y muerte, como ocurre en el Werther de Goethe. El amor atrae al romántico como vía de conocimiento, como sentimiento puro, fe en la vida y cima del arte y la belleza. Pero el amor acrecienta su sed de infinito. En el objeto del amor proyecta una dimensión más de esta fusión del Uno y el Todo, que es su principal objetivo. Pero no alcanzará la armonía en el amor. El romántico ama el amor por el amor mismo, y éste le precipita a la muerte y se la hace desear, descubriendo en ella un principio de vida, y la posibilidad de convertir la muerte en vida: la muerte de amor es vida, y la vida sin amor es muerte. En el amor se encarna toda la rebeldía romántica: "Todas las pasiones terminan en tragedia, todo lo que es limitado termina muriendo, toda poesía tiene algo de trágico" (Novalis).
LA POESÍALa poesía dejó de ser superficial para ser subjetiva, moral y social. El poeta podía dejar volar libremente su fantasía sin sujetarse a modelos ni normas, buscando tan sólo la expresión auténtica de su alma, sus sentimientos más sinceros. Lo importante era ser original y dejarse llevar por la inspiración y no imitar o elaborar trabajosamente las formas. El Yo halló en la poesía el cauce ideal para desnudarse sentimentalmente.

José de Espronceda (1808-1842)
Es uno de los poetas más importantes de la lírica romántica española. Y es sin duda el más completo gracias a su capacidad imaginativa y de evocación.
Obra:
  • poesías breves: Himno al solCanción del pirataCanto del cosacoEl reo de muerteEl mendigoEl verdugoA Jarifa en una orgía
  • poemas mayores:
Estudiante de Salamanca, la mejor y más brillante obra de Epronceda , es un largo poema de carácter narrativo estructurado en cuatro partes. Su protagonista burla y abandona a su amada y ésta muere de amor. Después mata en un duelo al hermano de ella. Contempla su propio entierro y finalmente muere.
El diablo mundo, un poema de carácter filosófico y simbólico sobre la existencia del hombre y el sentido de la vida.
Rosalía de Castro (1837-1885)
Aunque es autora de alguna novela, como La hija del mar, Rosalía de Castro es una de las escritoras más relevantes de la literatura española gracias a su poesía romántica.
Obra:
Sus obras fundamentales son tres libros de versos:
  • Cantares gallegos: obra escrita en gallego en la que costumbres, gentes de la aldea, amores, paisajes, etc, cruzan por ella mediante una visión poética, nostálgica y amable. También denuncia el trato despectivo que recibe el emigrante gallego de los castellanos.
  • Follas novas: es una obra de carácter más subjetivo e intimista. Plasma en sus versos el dolor, la soledad, la pobreza y el infortunio de sus paisanos.
  • En las orillas del Sar: consigue con estos versos su lírica más alta y acendrada. Muestra en esta obra la desolación y la desesperanza.
Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870)
Este gran escritor romántico nace en Sevilla: Queda huérfano y va a vivir con su madrina en cuya biblioteca lee lo mejor de la literatura romántica europea. Se traslada a Madrid donde escribe en periódicos y revistas. Se casó pero su matrimonio duró poco. Finalmente muere con treinta y cuatro años.
Obra:
La obra poética de Bécquer está formada por un conjunto de composiciones tituladas Rimas. En este libro predominan temas como el amor, el misterio, la naturaleza, las sensaciones, la ensoñación y las vivencias, la sugerencia y la mera evocación. Son poemas más bien breves y en su mayoría asonantados.
Se dividen en cuatro grupos:
  • rimas I a XI: se centran en el propio tema poético, el misterio de la poesía, la inspiración y el genio lírico.
  • rimas XII a XXIX: el tema dominante es el amor esperanzado y gozoso
  • rimas XXX a LI: el motivo principal es el fracaso amoroso.
  • Rimas LII hasta el final: el tema central es el dominio de un sentimiento de soledad y de vacío en un tiempo sin amor.
Bécquer escribió también en una magnífica prosa unas cartas tituladas Desde mi celda (recoge impresiones sobre el arte, la vida, el paisaje o las costumbres).
Es autor también de unas Leyendas formadas por un grupo de breves relatos sugerentes y evocadores, cargados de poesía, imaginación y fantasía. Sus Leyendas más conocidas son: El monte de las ánimasEl miserereÁmese Pérez el organistaEl besoEl rayo de luna, Los ojos verdesLa promesaLa rosa de pasión y La cruz del diablo.
LA PROSA
En la prosa van a destacar géneros como la novela histórica y el costumbrismo.
  • La novela histórica: pretende resucitar por medio del arte a personajes, situaciones o conflictos del pasado histórico. Pero los románticos buscan en el pasado las raíces del presente, y llevan a él los problemas de su tiempo y de su sociedad
  • El costumbrismo: se limita a la observación de los aspectos típicos y pintorescos de las costumbres locales. Se pierde así el carácter crítico y la intención de reforma social que animaba a los observadores del XVIII. Los costumbristas son observadores atentos de la realidad que les rodea y la describen en forma de escenas, breves cuadros ligeros y entretenidos de algunas situaciones típicas como una romería, una procesión, etc.
El autor más característico de la prosa romántica es:
Mariano José de Larra (1809-1837)
Larra, que publica también un drama romántico (Macías) y una novela histórica (El doncel de don Enrique el Doliente), es ante todo periodista. Concibe en el periodismo una faceta educativa pero también un modo de reflejar y criticar la realidad social.
Artículos de costumbre: ofrece una mirada crítica, preocupada, amarga y pesimista de la sociedad española. Vuelva usted mañanaUn castellano viejoCasarse pronto y malLas casas nuevasEl día de difuntos de 1836La nochebuena de 1836.
Artículos políticos: muestra su ideología avanzada y liberal pero también su desengaño y desilusión por la situación política española. Nadie pase sin hablar al portero.
Artículos de crítica literaria: especialmente referidos al teatro. El sí de las niñasLa conjuración de Venecia son algunas de las obras que valora. Destaca su artículo Literatura
Otros autores importantes son Ramón de Mesonero y Serafín Estébanez, interesados por el costumbrismo.
TEATRO
Triunfo del romanticismo en el teatro.
  • El teatro neoclásico no gustó a los españoles, pero si las obras del Siglo de Oro.
Éstas eran repudiadas por los neoclásicos, pero atraían a los de fuera del país; mezclaban lo cómico y lo dramático, eran apasionadas, brillantes y llenas de extrañas peripecias.
Los jóvenes autores se adhirieron al Romanticismo, así pues, se producen los mayores éxitos del Romanticismo teatral.
  • El teatro romántico prefiere los temas legendarios, caballerescos, aventureros, o
históricos nacionales. En cuanto a los fines, el teatro románico no aspiran a aleccionar sino a conmover. Los protagonistas son seres marcados por un destino extraño y singular.
En los dramas románticos abundan las escenas nocturna y sepulcrales, desafíos, personajes encubiertos y misteriosos, suicidios, alardes de gallardía o de cinismo.
AUTORES
Martínez de la Rosa (1787-1862)
Francisco Martínez de la Rosa nació en Granada. Algunas de sus obras más estacadas son: La niña en casa y la madre en la máscara, Aben Humeya y La conjuración de Venecia.
El Duque de Rivas (1791-1865): Ángel de Saavedra y Ramírez de Baquedano
Sus obras más destacadas son: Un castellano leal, El aniversario, Don Álvaro o la fuerza del sino.
Antonio García Gutierrez (181-1884)
.Escribió El trovador y Don Álvaro.
Juan Eugenio Hartzenbusch (1806-1880)
Escribió Los amantes de Teruel.
José Zorrilla (1817-1893)
Además de notable poeta, Zorrilla es posiblemente el mejor autor dramático del romanticismo.
Obra:
Asume los caracteres del Romanticismo. Escribió millares de versos. Su poesía alcanza sus momentos más felices en lasleyendas, que son pequeños dramas contados como narraciones en verso. En esta fusión de lo lírico, lo épico y lo dramático reside lo peculiar y distintivo de Zorrilla. Las más importantes de sus leyendas son Margarita de Tornera A buen juez, mejor testigo.
Sus obras dramáticas son: El zapatero y el rey; Traidor, inconfeso y mártir. Pero la más célebre de sus obras, representada aún como un rito en muchas ciudades españolas, es Don Juan Tenorio (1844). En la obra desarrolla el tema del burlador de Sevilla; es obra desigual, de briosos pasajes y ripios sin cuento, tiene un conjunto de hidalguías, misterios de ultratumba, caprichos, astucias, generosidades y arrepentimientos. El personaje implora lo que antes pudo poseer y se salva al final por el amor de doña Inés.



ROMANTICISMO

El romanticismo es una revolución artística, política, social e ideológica tan importante que todavía hoy viven muchos de sus principioslibertad, individualismo, democracianacionalismo, etc.
Entre 1770 y 1800 "Europa se acostó absolutista y neoclásica y se levantó demócrata y romántica". Gracias a la revolución industrial inglesa (1760-1840), que desarrolla una clase burguesa y sienta las  del liberalismo; gracias a la revolución francesa (1789), que proclama los principios de libertad, igualdad y fraternidad; gracias igualmente a la revolución americana con su Declaración de Independencia (1776), que hace de los derechosdel hombre su centro y establece la república como forma de gobierno y al pueblo como fuente exclusiva del poder; gracias a todos estos hechos la Libertad reemplaza a la tiranía, el poder absoluto se ve limitado y la democracia se erige en ideal de gobierno.
Para los clasicistas la belleza depende, en forma subjetiva, de los objetos (unidad, variedad, regularidad, orden, proporción, etc.), más que de la sensación que producen éstos en quien los contempla. La belleza, en consecuencia, ha de proporcionar un estado de placer sereno, fruto del orden y la proporción, como ocurre con el arte griego. Pero también se tuvo en cuenta en el siglo XVIII junto a lo bello lo sublime, que desde la Antigüedad tenía que ver con la emoción. Dice el griego Longinos:
"lo sublime es lo que nos emociona por su magnitud y energía superior a las  humanas; la Naturaleza, el cosmos, la grandeza y profundidad depensamiento..."
Junto a la belleza clásica y serena, los neoclásicos también disfrutaron, pues, de la sublimidad, de las emociones fuertes en el , de la Naturaleza majestuosa y sublime, de los motivos fúnebres, macabros o sobrenaturales. Kant lo reflejó muy bien:
"El aspecto de una cadena de montañas cuyos picos nevados se pierden entre las nubes, la descripción de una tormenta o la que hace Milton del reino infernal, nos producen un placer mezclado con terror. El espectáculo de los prados poblados de flores y los valles surcados por arroyuelos, y donde pacen los rebaños, nos producen también un sentimiento agradable, pero plenamente gozoso y amable... La noche es sublime, el  es bello. Los que poseen el sentimiento de lo sublime están inclinados hacia los sentimientos elevados de la amistad, la eternidad, el desprecio del mundo,  de las noches de verano tachonadas por la temblorosa luz de las  y la solitaria luna en el horizonte. Lo sublime emociona, lo bello encanta. Lo sublime terrible, cuando se produce fuera de lo , se convierte en fantástico."
El Romanticismo arranca de aquel sujeto que la Ilustración reivindica frente al hombre que el cartesianismo deja en manos del Ser Supremo. La autonomía del sujeto como primer logro del pensamiento ilustrado es fundamental para la concepción que el hombre romántico tiene de sí mismo y en relación a la Naturaleza.
Diderot y Rousseau rehabilitan la sensibilidad, la pasión y el amor por la naturaleza. No obstante, mientras el pensador ilustrado puede descubrir elvalor de la sensibilidad, no hace de ella el centro de la existencia humana, mientras el romántico concibe para sí y en sí mismo un alma que experimenta intensamente el amor por la naturaleza, que se consume en sus emociones y en sus dolores, y que en el fondo siempre se busca a sí misma en todo lo que hace.

2. Romanticismo: Su esencia.

Es difícil definir qué sea el romanticismo. Su carácter revolucionario es incuestionable. Supone una ruptura con una tradición, con un orden anterior y con una jerarquía de valores culturales y , en nombre de una libertad auténtica. Se proyecta en todas las artes y constituye la esencia de lamodernidad.
Aunque la unanimidad del movimiento romántico reside en una manera de sentir y de concebir al hombre, la naturaleza y la vida, cada país produce un movimiento romántico particular, distinto; incluso cada romanticismo nacional desarrolla distintas . En Francia o en España se suelen distinguir un romanticismo de apariencia católica y nacional de otro más liberal y materialista. En Alemania o Inglaterra se diferencia un primer romanticismo de un segundo movimiento, más maduro y menos teórico.
El Romanticismo significó un cambio de gusto de la época y de las teorías estéticas de la creación. Lo moderno frente a lo neoclásico, simbolizado en lo francés y en la imitación de los modelos antiguos. Lessing ataca el teatro francés clasicista, propone imitar a Shakespeare y crear un  nacional. Herder defiende la existencia de un espíritu nacional ligado al idioma cuyo desarrollo es la historia de cada país; la manifestación de ese espíritu en las creaciones del pueblo y en los grandes poetas, sobre todo en la Edad Media cristiana. Afirma el nacionalismo y el populismo que Schiller practicaría en su teatro. En Inglaterra revive el interés por la mitología y tradiciones medievales escandinavas o celtas y se cultiva un nuevo sentimiento ante la Naturaleza (Wordsworth y Coleridge). Goethe, en Werther, dibuja el "mal del siglo", y en su Fausto, busca un sueño imposible de inmortalidad.
F. Schlegel, contra la necesidad defendida por los neoclásicos de ajustar la creación a unas reglas o leyes, sostiene que la poesía crea sus propias normaspues es engendrada por la fuerza original invisible de la humanidad. Sigue a Schiller, que oponía la poesía ingenua y sentimental (moderna) a la poesía objetiva. Esta tenía por objeto la perfección , que se conseguía a través de sus limitaciones, mientras la moderna y sentimental subordinaba lo formal al contenido, que era una aspiración al .
Francia había representado la vanguardia del Neoclasicismo, y a pesar de las tempranas manifestaciones que surgen dispersamente en este país y en Inglaterra preludiando el advenimiento del romanticismo, la vanguardia romántica nace en Alemania, bajo el principio kantiano del progreso hacia el infinito de los seres racionales finitos y en las inmediatas manifestaciones nacionalistas alemanas. Herder habla de una nueva literatura, moderna, frente a la clásica francesa. La búsqueda de una identidad nacional se hace coincidir con la necesidad de impulsar una cultura propia.

3. El romanticismo moderno.

"Antes de Dante y Petrarca, el YO yace enquistado bajo la fortaleza de una ontología tiránica pero consoladora; después de Galileo y Shakespeare, transcurrida su gran aventura de autorreconocimiento, su agotadora vitalidad deberá perderse en los distintos caminos del empirismo, delracionalismo y de la restauración de la metafísica tradicional. Entre ambos momentos, el hombre -ya hombre moderno- por primera vez ha alcanzado a ver, con una fecundísima mezcla de fascinación y terror, la verdadera dimensión de su soledad". (Rafael Argullol, La razón romántica)
La Ilustración, heredera del Renacimiento en esto, significó una reordenación del mundo y un impulso al progreso de las ciencias, todo ello necesario para acabar con la metafísica, los prejuicios y la superstición y exponer la relatividad de las costumbres que se acataban como verdades reveladas. La Ilustración cumplió su misión: afirmar al hombre, concediéndole el poder de conquistar la Naturaleza y dominarla en un sueño de progreso hacia la felicidad. Pero los pensadores ilustrados imponen límites al conocimiento: ante la imposibilidad de conocer la cosa en sí, sólo se interesan por el conocimiento de los fenómenos, de la realidad sensible, considerando que aquello que nuestros sentidos no pueden concebir no tiene ninguna utilidad.
El romántico, sin embargo, entiende que en el interior del hombre actúan distintas fuerzas, y que la esencia de lo humano rebasa la esfera de lo inconsciente y de lo racional. El romántico, además de su rebeldía contra el orden del mundo heredado, se opone a la separación entre razón y sentimiento, entre lo real y lo irreal.
Para el romántico la naturaleza no es un objeto, un todo mecánico como quería Descartes, sino un todo orgánico, vivo. El yo romántico rechaza formar parte de la naturaleza como una pieza más de su engranaje, y, por el contrario, hace constar su individualidad, su capacidad creadora y transformadora que extrae de sí mismo, de su interior, y plantea una relación con la naturaleza como una comunicación del Uno al Todo, que a la vez desencadena su aspiración al infinito: "imagínate lo finito bajo la forma de lo infinito y pensarás al hombre" (F. Schlegel).
El romántico transforma el instinto en arte y el inconsciente en saber. Crear significa aproximarse a su verdad, a la última dimensión del ser.
El conflicto del hombre romántico, el "mal del siglo", su crisis religiosa y existencial es consecuencia de su propia singularidad y de la imposibilidad de fundir su Yo con la alteridad, con el Todo; de, siendo finito, desear unirse y transformarse en infinito.
"¿Queréis saber la historia abreviada de casi toda nuestra miseria? Es esta. Existía un hombre natural; se ha introducido dentro de este hombre un hombre artificial; y se ha suscitado en la caverna una guerra civil que dura toda la vida. Tan pronto el hombre natural es el más fuerte, como es derribado por el hombre moral y artificial; y en uno y en otro caso, el triste monstruo es distendido, atenaceado, atormentado, extendido sobre la rueda; gimiente sin cesar, incesantemente desdichado, ya lo transporte y embriague un falso entusiasmo de gloria o lo encorve y abata una falsa ignominia" (Diderot).

 


Despedida de la Patria

 
Lejos ¡ay! del sacro techo
Que mecer mi cuna vio,
Yo, infeliz proscrito, arrastro
Mi miseria y mi dolor.
Reclinado en la alta popa
Del bajel que huye veloz,
Nuestros montes irse miro
Alumbrados por el sol.
Adiós, patria! ¡Patria mía,
Aún no puedo odiarte; adiós!
A tu manto, cual un niño,
Me agarraba en mi aflicción;
Mas colérica tu mano
De mis manos lo arrancó;
Y en tu saña desoyendo
Mi sollozo y mi clamor,
Más allá del mar tu brazo
De gigante me lanzó.
¡Adiós, patria! ¡Patria mía,
Aún no puedo odiarte; adiós!
De hoy ya más, vagando triste
Por antípoda región,
Con mi llanto al pasajero
pediré el pan del dolor;

De una en otra puerta el golpe
Sonará de mi bastón,
¡Ay, en balde! ¿en tierra extraña
Quién conocerá mi voz?
¡Adiós, patria! ¡Patria mía,
Aún no puedo odiarte; adiós!
¡Ah, de ti sólo una tumba
Cada tarde la excavaba
Demandaba humilde yo!
Al postrer rayo del sol.
«¡Vé a pedirla al extranjero!»
Fue tu réplica feroz;
Y llenándola de piedras
Tu planta la destruyó.
Adiós, patria! ¡Patria mía,
Aún no puedo odiarte; adiós!

En un vaso un tierno ramo
Llevo de un naranjo en flor;
¡El perfume de la patria
Aún aspiro en su botón!
El mi huesa con su sombra
Cubrirá; y entonces yo
Dormiré mi último sueño
De sus hojas al rumor.
¡Adiós, patria!¡Patria mía,
Aún no puedo odiarte; adiós!

José Eusebio Caro (1817 - 1853)